
La otoplastia es la técnica de cirugía estética que se emplea para corregir las orejas en soplillo de niños y adultos. Es una intervención muy agradecida, porque el antes y después de una otoplastia provoca un cambio importante en la apariencia de los intervenidos, que les provoca una gran satisfacción y agradecen eternamente.
Las orejas en soplillo son el origen de muchos trastornos psicológicos en la infancia y adolescencia, generando problemas de autoestima y de dificultades de relación en el caso de los adultos. Sin embargo, esta anomalía se resuelve con una sencilla operación de cirugía plástica, cuyos resultados son además paras siempre.
Con la otoplastia conseguimos remodelar o reducir el tamaño de las orejas, pero siempre dando armonía a las mismas de modo que estén en consonancia con el rostro. De este forma, logramos que los pacientes recuperen su estabilidad emocional, algo que muestran inmediatamente cuando ven el antes y después de la otoplastia a la que se les ha sometido.
Estructura de la oreja

Partes de la oreja
Para entender bien el caso de orejas en soplillo de la paciente menor que exponemos a continuación, es importante aclarar cuáles son las partes de la oreja. Ésta es básicamente una estructura de cartílago que configura prácticamente todo su esqueleto a excepción del lóbulo.
La mayoría de las malformaciones de las orejas se producen por anomalías anatómicas del cartílago auricular o de su ubicación. Y la más frecuente es la que se produce por una posición más o menos despegada de las orejas respecto a la cabeza. Es lo que se conoce como orejas en soplillo.
Las partes de una oreja son: hélix, antehélix, concha, lóbulo, trago y antitrago.
A la hora de practicar una otoplastia hay que tener en cuenta cada una de estas partes, ya que en función del trastorno que se tenga, la intervención se centrará en una u otra y la técnica practicada puede variar ligeramente.
Antes y después de una otoplastia

Esta paciente es una niña que presenta unas orejas en soplillo, tal y como se observa en la foto del antes y después de la otoplastia que la hemos practicado.
Las orejas en soplillo se caracterizan por dos aspectos: el exceso de la concha y la falta de pliegue del antehélix. En este caso se han utilizado dos técnicas simultáneamente, a través de una incisión posterior.
Tras la cirugía plástica practicada, podemos apreciar una disminución de la concha, que está alojada dentro de los músculos retroauriculares y la formación del antehélix, lo que permite que el hélix se pliegue posteriormente.
El estado postoperatorio de la paciente después de la intervención fue satisfactorio, y como se aprecia en el antes y después de la otoplastia, muestra un correcto plegado de la oreja con respecto a la pared craneal. Es decir, finalmente hemos conseguido corregir las orejas en soplillo de la niña, a la par que hemos dado equilibrio y armonía al conjunto de su rostro, uno de los objetivos que siempre persigue el cirujano plástico.


El Doctor Eugenio Lalinde, Premio Extraordinario de Licenciatura en Medicina y Cirugía por la Universidad de Santiago de Compostela, Doctor en Medicina y Cirugía, por la Universidad de Alcala de Henares, y Especialista en Cirugia Plastica Reparadora y Estetica por el sistema MIR con la puntuación mas alta de los Residentes de ese año, es uno de los mejores cirujanos plásticos de Madrid. Poniendo siempre al paciente y su bienestar en el eje central, te ayudará a conseguir tus objetivos estéticos y funcionales con los recursos técnicos más avanzados y un estudio de los casos totalmente personalizado. Porque conocer verdaderamente al paciente y entender su situación es lo que hace poder ayudarle a mejorar su vida.