¿Cómo planificar esta cirugía?
En la primera consulta se evalúa el estado de salud general, en qué partes se encuentra la acumulación de grasa y cómo es la piel del paciente.
Al mismo tiempo, ofrecemos información de tratamientos alternativos que se pueden combinar con la lipoescultura. Por ejemplo, abdominoplastia, elevación facial o lifting de cuello si hay un exceso de piel en esta zona, entre otras opciones.
También es importante estar al tanto de cómo ha sido la evolución de los cambios de peso y si se han producido algún aumento o pérdida en distintos periodos.
Preparación
En todas las intervenciones de cirugía estética es necesario realizar una preparación previa. Es importante saber cómo prepararse y estar informado de qué comer y qué fármacos tomar o evitar.
Te daremos instrucciones específicas para la cirugía, incluyendo ciertas normas sobre qué comer, beber, fumar y sobre ciertos medicamentos que debes tomar o evitar.
Tipos de anestesia
La anestesia de una liposucción está sujeta a la cantidad de grasa que se vaya a extraer. Si se trata de un procedimiento que no es muy largo y es poca la cantidad de grasa que se va a sustraer, podremos usar anestesia local para entumecer la zona, y combinarla con sedación para estar más relajado.
Si se pretende tratar un área grande o incluso abordar varias localizaciones, seguramente se recurra a la anestesia general y permanecer ingresado al menos un día.
La intervención
La liposucción o lipoescultura consiste en la realización de una incisión en el área a tratar que permita la introducción de un tubo vacío llamado cánula. El lado opuesto de esta cánula está sujeto a una unidad con presión al vacío que succiona la grasa.
El proceso dura alrededor de una o dos horas. El tiempo estará condicionado por el sector tratado y la cantidad de grasa que se vaya a sacar.